El todo y las partes

    Cinco lecciones

    Concebir la realidad es preguntarse por todo, distanciarse de todo, ser libre, para conducir la respuesta desde el propio todo, la energía, hasta la garantía absoluta de ser inagotable, hasta el absoluto mismo. El todo es el principio por ser el principio de la solución al gran problema, el de la libertad, el del ser, la solución que no para hasta la elección por excelencia, la gran prueba, la prueba irrefutable. El todo no es elección, pero por preparar todo lo que es elegir, todo lo que es transitar entre la variación y la unidad, dar con el uno entre los varios, componer de extremo a extremo, bastante más preciso que mutar. Dicha preparación es tan exhaustiva que el ser del todo, al dejar fuera la nada, lo único que queda realmente fuera, encuentra las partes, la creación genera las criaturas, el modo de llenar el hueco entre la nada y el todo, el sentido inferior hecho realidad, las realidades parciales, hasta la gran obligación, necesidad o atadura, a saber, las personas en sus grupos, en sus cooperaciones y en sus competiciones, la memoria, las señales, que son emoción y lenguaje, y el pensamiento, tanto el abstracto como, más, el concreto o práctico, la práctica misma, la experiencia, desde el pensamiento político hasta el económico, porque el creativo es el propio todo, tan suficiente como libre, lo novísimo, lo noveno, contra lo que es en ocho. Las partes son reales sobre todo porque eligen, claro que al completo sólo en ellas, cada cual sin tener en cuenta a las restantes, lo que es bien o acierto, aunque limitado, solución de cada parte, no solución de la libertad, la libertad del todo. Es cierto que todas las partes, por debajo de sus limitaciones, yerran, pero el error, el mal es lo incompleto de base, incluso aciertan ilimitadamente, claro que tal elección nada es sin una ilimitación tan total como la del desarrollo completo del todo, lo excepcional de este modo, la única excepción en principio, la (elección en) conciencia. Una conciencia que nada es sin el progreso en sus tres detalles, la vida, en concreto, como la elección entre las partes, la muerte, en concreto, como la renuncia al sentido inferior o relativo, hasta el fondo, no sólo el continuo o biológico, sino el indistinto o físico, ya que partes y todo son lo discreto al máximo, lo complejo o social, y el absoluto, en concreto, como la apuesta más decidida por el sentido superior, hasta dejar la realidad frente a lo que la supera, el misterio, un reconocimiento sin el que la realidad es nada. Prácticamente todo en la conciencia es incomparable, con lo que culminan los cuatro tipos mayores de elección, la que no llega a las comparaciones, que es la errónea, la limitada, que es la elección en igualdad, si se prefiere, la comprensión, la generalización o el algoritmo, la ilimitada, que es la elección en desigualdad, si se prefiere, la producción, la discriminación o el heurístico, y la incomparable en el sentido de ir más allá de toda comparación. Así que, entre la nada y el misterio, entre lo único que queda realmente fuera y lo único que va más allá, incluso poseyendo cierta realidad, la de ser el gran intuido, la nada desde el ser del todo y el misterio desde el absoluto, mediados ambos extremos por la totalidad de las partes, todo es realidad, todo es conocimiento, irreversiblemente. La vida sólo es plena si elige todo, lo que es elegir entre las partes, en el fondo, ser libre, aunque todo esto es insuficiente de no alcanzar la supervivencia, desde la muerte hasta la inmortalidad, es decir, hasta el absoluto, lo único libre o real por completo.

    Autor
    Colección
    Filosofía
    Número en la colección
    1
    Materia
    Ensayo
    Idioma
    • Castellano
    EAN
    9788417387310
    Páginas
    152
    Ancho
    15,3 cm
    Alto
    23,6 cm
    Edición
    1
    Fecha publicación
    30-01-2019
    Rústica con solapas
    14,20 €Comprar en Antártica

    Sobre Juan Santa Cruz (Autor)

    • Juan Santa Cruz
      Juan Santa Cruz es profesor titular del Departamento de Procesos Cognitivos de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid. Desde 1974 imparte clases referidas a aspectos de la metodología experimental y al procesamiento del pensamiento y de los lenguajes na... Ver más sobre el autor

    Libros relacionados